Primero fue la angustia y el dolor, la noticia de que una enfermedad se instaló en su cerebro de manera irreversible.
… El cerebro, ese centro comandante, ese lugar donde mi madre tejía relatos y canciones, ahora la desestabilizaba...
Después fue la tormenta, el tormento, verla desvanecer, escuchar cada vez menos fuerte su voz hasta el silencio. Ella, que no le tenia miedo a la palabra, que la ponía siempre al frente; inquieta, polémica, juguetona.
El otoño tiene ese color cálido y melancólico, es viento fuerte que se lleva pensamientos. Yo siento que este otoño me ayudó a transitar este duelo. Los libros como el viento de otoño revolucionan y también abrazan. Universos fugaces, es un libro que llegó a mi como un abrazo. Recuerdo que me llamó la atención el trazo siempre entrañable de Pilar Centeno, y la fuerza del título me atraía como una mariposa, vieron que cuando una mariposa pasa es inevitable seguirla con la mirada y casi que queremos acompañarla en su paseo (les pasa?) algo así me paso con este libro. Me puso a reflexionar de a poco en la finitud y la eternidad, en las bienvenidas y las despedidas; en ese proceso triste, inquietante y lento que estaba transitando con la enfermedad de mi madre. Y finalmente, cuando llegó su partida, volvi a él buscando ese abrazo.
Lo guardo en mi mesita de luz, real y metafóricamente, porque está en un lugar especial de compañia en un proceso doloroso pero a la vez me trae calma. De muchas maneras recorrer sus ilustraciones y sus palabras me ayuda a digerir la ausencia. Y es que, cito un fragmento:
“con el tiempo esa ausencia, se va volviendo una presencia invisible que nos hace compañia”.
Universos Fugaces es un libro que se gestó en la parte fuerte de la pandemia, cuando las pérdidas tenían nuestras mentes inquietas y nuestros corazones entristecidos. Realizado por grupo maravilloso de mujeres Cintia Roberts, Ana Sagripanti, Sofia Chas, con ilustraciones de Piral Centeno, editado por Casitas de papel.
Espero que se encuentren también con Universos Fugaces, es un libro para guardar en la mesita de luz. Les dejo un poco de sus páginas interiores que son un sueño colorido.
Galope 